*Si la contingencia rebasa los 30 días, habrá afectaciones a la planta productiva y miles de mexicanos perderán su empleo, unos 200 mil; se requerirán apoyos fiscales: Macías
POR AGP
CELAYA, GTO.- Hasta este viernes no había cierre de empresas en la localidad, sólo bajó el ritmo de producción por paros escalonados, pero si la emergencia por el COVID-19 se prolonga por más de 30 días, habrá afectaciones a las empresas y se perderían unos 200 mil empleos en el país; para mitigarlos se van a requerir apoyos financieros y fiscales.
En esta tesitura se expresaron Víctor Macías Paredes, presidente de la delegación de Canacintra en Celaya, y Juan Yúdico Herrasti, presidente de la Coparmex Celaya, quienes confirmaron que las empresas están aplicando medias de prevención y contención contra el Coronavirus para que las plantas productivas no sean fuente de contagio.
Desde el momento en que se anunció la suspensión de clases en las escuelas, las empresas empezaron a realizar paros escalonados y cambios de turno para que los hogares donde el padre y la madre trabajan pudieran atender a sus hijos, así lo hicieron, entre otras empresas, GKN y Arbomex, por citar dos ejemplos.
Los paros de Honda, hasta hoy sólo por dos días, y Toyota que lo elevó a casi 15 días, no han ocasionado que paren otras empresas de la región, salvo sus proveedores directos que son empresas grandes y que pueden pagar los salarios de los trabajadores, pero en el caso de las pequeñas y medianas, no tienen esa solvencia.
MIEDO DEL TRABAJADOR A PERDER SU EMPLEO
Esto ha generado incertidumbre y temor entre los trabajadores; pues, aunque el Artículo 429 Inciso IV, precisa que en caso de suspensión por contingencia el patrón pagará un día de salario mínimo por cada uno de los días no laborados, sin que exceda de un mes, esto es insuficiente y a partir de ahí podrían ser despedidos.
Independientemente de ello, si la contingencia obliga a tomar otras medidas y rebasa los 30 días, las empresas estarán en riesgo y también el empleo de por lo menos 200 mil trabajadores en todo el país.
CELAYA, GTO.- Hasta este viernes no había cierre de empresas en la localidad, sólo bajó el ritmo de producción por paros escalonados, pero si la emergencia por el COVID-19 se prolonga por más de 30 días, habrá afectaciones a las empresas y se perderían unos 200 mil empleos en el país; para mitigarlos se van a requerir apoyos financieros y fiscales.
En esta tesitura se expresaron Víctor Macías Paredes, presidente de la delegación de Canacintra en Celaya, y Juan Yúdico Herrasti, presidente de la Coparmex Celaya, quienes confirmaron que las empresas están aplicando medias de prevención y contención contra el Coronavirus para que las plantas productivas no sean fuente de contagio.
Desde el momento en que se anunció la suspensión de clases en las escuelas, las empresas empezaron a realizar paros escalonados y cambios de turno para que los hogares donde el padre y la madre trabajan pudieran atender a sus hijos, así lo hicieron, entre otras empresas, GKN y Arbomex, por citar dos ejemplos.
Los paros de Honda, hasta hoy sólo por dos días, y Toyota que lo elevó a casi 15 días, no han ocasionado que paren otras empresas de la región, salvo sus proveedores directos que son empresas grandes y que pueden pagar los salarios de los trabajadores, pero en el caso de las pequeñas y medianas, no tienen esa solvencia.
MIEDO DEL TRABAJADOR A PERDER SU EMPLEO
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| Víctor Macías Paredes. |
Esto ha generado incertidumbre y temor entre los trabajadores; pues, aunque el Artículo 429 Inciso IV, precisa que en caso de suspensión por contingencia el patrón pagará un día de salario mínimo por cada uno de los días no laborados, sin que exceda de un mes, esto es insuficiente y a partir de ahí podrían ser despedidos.
Independientemente de ello, si la contingencia obliga a tomar otras medidas y rebasa los 30 días, las empresas estarán en riesgo y también el empleo de por lo menos 200 mil trabajadores en todo el país.
NO HAN AUMENTADO LOS CASOS COMPROBADOS DE CORONAVIRUS
Guanajuato tiene una ventaja, hay pocos casos, de acuerdo con información de la secretaría de Salud y del propio gobernador del estado, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, quien anunció que sólo cuatro casos han sido positivos, 58 han sido descartados, 22 en estudio. Los cuatro casos confirmados fueron importados y las personas están estables.
Esto para Guanajuato es una ventaja, pues las autoridades han estado aplicando las medidas de prevención adecuadas, pero también las empresas están ejecutando las recomendaciones dadas por el sector salud, para que los centros de trabajo no sean fuente de contagio.
PIDEN APOYOS AL GONIERNO FEDERAL Y AL ESTADO
De igual manera mencionaron Macías y Yúdico, que sus representantes nacionales ya hicieron algunos planteamientos de apoyo financiero y fiscal a las autoridades federales y estatales para asegurar liquidez al mercado interno; estimular el consumo privado; facilitar y estimular la inversión privada; elevar consumo e inversión del sector público; y dar señales positivas a los mercados internacionales.
Estos puntos incluyen un amplio número de medidas económicas, fiscales y administrativas, que permitan a los empresarios fortalecer la economía para sobrellevar la etapa de crisis.
MEDIDAS URGENTES Y PRIORITARIAS: CCE
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| Juan Yúdico Herrasti. |
Asegurar la liquidez en el mercado financiero. La prioridad es que la intermediación financiera sea fluida en el corto y en el largo plazos.
Mantener el esfuerzo de austeridad y disciplina en el manejo de las finanzas públicas. Sin embargo, en este momento de retos inéditos, el gobierno debe abandonar el objetivo de lograr el 1% del PIB de superávit primario. Los recursos liberados deben ser utilizados para los apoyos a la reactivación de la economía. Si es necesario, tomar deuda de una forma responsable.
Fortalecer el Acuerdo de Inversión en Infraestructura entre el Sector Privado y el Gobierno y anunciar de inmediato el plan de inversiones del sector privado en el sector energético.
Depreciación acelerada automática. Establecer la posibilidad de efectuar la deducción inmediata de las inversiones que las empresas realicen sin limitación geográfica alguna, durante el ejercicio de 2020.
Preservar el empleo. En los casos en que sea inevitable el recorte de puestos de trabajo, otorgar apoyos del gobierno a las empresas con recursos fiscales, para que a estos trabajadores se les otorgue al menos un salario de subsistencia.
Respetar de forma irrestricta el Estado de Derecho, evitando las amenazas de cambios a las normas ya en operación, para empresas que invirtieron en el sector eléctrico, y cambios inaceptables como consultas populares para inversiones que ya están hechas.
Acelerar los pagos pendientes a proveedores de CFE y Pemex. Es urgente el pago de pasivos a proveedores por productos y servicios, ya entregados en cualquiera de los tres niveles de gobierno, federal, estatal o municipal.
Apresurar las devoluciones pendientes de IVA a las empresas y restaurar la compensación universal. Las empresas necesitan más la liquidez que el gobierno, en este momento.
Conformar un equipo con representación tripartita del sector privado, trabajadores y el Gobierno para analizar el impacto económico, y determinar acciones a seguir en esta crisis económica.
Activar programas especiales de garantías para fortalecer algunos de los sectores más afectados. El papel contracíclico histórico de la Banca de Desarrollo en situaciones de crisis ha sido fundamental para preservar la planta productiva. Creemos que todas estas medidas – tanto las de corto plazo como las de mayor profundidad- ayudarán a contener los efectos económicos de la pandemia que enfrentamos y contribuirán a conservar el empleo y a dar liquidez a personas y empresas, para crear las condiciones de recuperación del crecimiento económico.
